¡Qué feliz era cuando solo sufría por amor!
Hubo un tiempo. Hace mucho. Un instante mejor en que solo sufrí por aquello que es hermoso sufrir. Hermoso y ridículo, tal vez, pero hasta de eso ya no puedo estar seguro. Y en esos remotos tiempos, el sufrimiento mismo se convertía en una suerte de "leitmotiv" para el díario vivir. Hoy, sufro y me angustio por tantas otras cosas, que me parece un despropósito sufrir, una pérdida de tiempo, mas no puedo evitarlo y es por eso que añoro los buenos tiempos cuando uno sufría por algo tan cándido como el amor. Como profesor me tocó tantas veces ver a alumnas y alumnos sufriendo por tal motivo. Yo los contemplaba con algo de pena, pensando para mí, que es tan ilógico sufrir por algo que solo los que algo más hemos vivido sabemos pasará, no quedará más que como un pequeño recuerdito -si es que- en nuestras almas. Pero claro, yo tampoco lo sabía entonces, y al igual que mis alumnos, pensaba que sufriría para siempre, que vivía para sufrir. Y en muchos aspectos era muy rico sufrir. L...